Las luces traseras se utilizan para garantizar que la moto sea claramente visible y esté iluminada por detrás en condiciones de poca luz.
Suelen tener un tamaño compacto y diversas formas, y pueden montarse en distintos lugares de la moto, como en la parte trasera o en el guardabarros trasero.
A menudo, las luces traseras también pueden tener funciones adicionales, como luces de freno, intermitentes o iluminación de la matrícula, para aumentar la seguridad y la visibilidad de la moto.