La suspensión delantera de una moto suele consistir en una horquilla telescópica que absorbe los impactos y proporciona estabilidad.
Los ejes de la suspensión delantera conectan la rueda a la horquilla y permiten una rotación suave.
Unos ejes de alta calidad son cruciales para una dirección precisa y una mayor estabilidad en la conducción. Los materiales de los ejes, a menudo de acero o aluminio, influyen en su durabilidad y peso.
El mantenimiento y la inspección periódica de la suspensión delantera son importantes para garantizar un rendimiento seguro y óptimo de la moto.