Los cables y los ejes son componentes cruciales para controlar una moto. Los cables del acelerador aseguran la transmisión del movimiento desde el puño del acelerador hasta el carburador o el sistema de inyección.
Los cables de embrague permiten controlar el embrague, facilitando el cambio de marchas. Los cables de freno conectan la maneta de freno a los mecanismos de frenado y garantizan así un frenado seguro.
Los cables Bowden y los conductos hidráulicos se utilizan a menudo para diversas tareas de control y requieren un mantenimiento regular para garantizar un rendimiento óptimo.
Estos componentes son esenciales para la seguridad y el rendimiento de una moto y deben mantenerse siempre en perfecto estado.